El cáncer de mama es el más frecuente entre las mujeres de todo el mundo según los datos de la OMS. Aunque no es tan habitual en los hombres, también lo pueden padecer, e incluso puede desarrollarse más rápido la enfermedad y ser más agresivo.
El autoexamen de las mamas es un procedimiento realizado por la mujer para examinarse física y visualmente y detectar cualquier cambio en sus mamas o axilas. No se ha demostrado que el examen por sí solo pueda determinar con precisión la presencia de cáncer de mama. Por lo tanto, la auto evaluación no se debe utilizar para reemplazar, sino para complementar, el examen clínico de las mamas, realizado por un profesional de la salud y la mamografía
Los exámenes de detección temprana encuentran enfermedades antes de que aparezcan los síntomas. El objetivo de la detección temprana es detectar una enfermedad en su etapa más temprana y más tratable. Para que pueda ser ampliamente aceptado y recomendado por los médicos, un programa de detección temprana debe cumplir con una serie de criterios, que incluyen la reducción del número de muertes por la enfermedad.
Las pruebas de detección pueden incluir pruebas de laboratorio que evalúan la sangre y otros fluidos, pruebas genéticas que buscan marcadores genéticos heredados asociados a la enfermedad, y exámenes por imágenes que producen imágenes del interior del cuerpo. Estas pruebas generalmente están disponibles para la población en general. Sin embargo, las necesidades de una persona con respecto a una prueba de detección se basan en factores tales como la edad, el sexo y los antecedentes familiares.
Con la detección temprana y mejores tratamientos, más mujeres sobreviven al cáncer de seno. Si le diagnostican un cáncer, su médico conversará con usted sobre las opciones de tratamiento, y juntos/as determinarán el tipo de tratamiento. Hoy en día, como nunca antes, las mujeres tienen muchas opciones de tratamiento.
Fuente: Dr. Adrián Guillen/Consultor y auditor médico para empresas de seguros/ Especialidad Medicina General.